martes, 15 de agosto de 2023

El Horno de la Calle Encomienda


El Horno de la Calle de la Encomienda en Madrid

Hace tres años que escribí esta líneas y mi ordenador de se petó, quedándose en borradores de Blogger esta historia. Así que una vez que tengo un ordenador volveré con mas historias, sobre todo de canciones.   
Hace mucho, mucho tiempo, acompañé a mi padre una tarde a la imprenta donde le imprimían  las participaciones de lotería de Navidad que él vendía en su kiosco del cupón pro ciegos. Sin saber que sería la última vez pues la ONCE innovó al año siguiente creando el cuponazo y dando un solo sorteo y numero diario para toda España (hasta entonces había un sorteo en cada provincia) subiendo el premio y el cupón, haciendo que ya los ciegos dejaran de vender lotería para cumplimentar sus ingresos.

En aquella tarde lluviosa yo un chaval de 15 años que no tenía ni idea de las calles de Madrid, me dejaba guiar por mi padre por aquellas calles del centro. Desde 1970 vivíamos en el extraradio. 

Salimos del metro de la estación de Tirso de Molina y se nos hizo de noche y caía una fina lluvia. Iba siguiendo las indicaciones de mi padre. Tomamos la calle Mesón de Paredes para abajo y la segunda a la derecha al rato de tomar esa calle, me pregunto ¿estamos ya cerca del cine?  le dije que faltaba muy poco el cine en cuestión era el desaparecido Odeón así que unos números más allá una puerta pequeña daba paso a una imprenta bastante vieja.


Antiguos Cines Odeón
Recuerdo el olor a tinta y el sonido de las máquinas multicopistas, dejé que mi padre y el encargado de aquel sitio hablando de la cantidad de talonarios, números y fecha de entrega, mi padre llevaba unos 30 años yendo allí a que le hicieran aquellas participaciones. ¡que pena no haberme quedado con alguna!.

Al salir de la imprenta mi padre me dijo:

 -vamos más a adelante a comprar "calcetines" si no llevamos a casa mamá se va enfadar.
Sin tener la más remota idea de que calcetines me hablaba, no pregunté y mientras pensaba sobre esos misteriosos calcetines, un olor a canela intenso llego  hasta nosotros, hemos llegado me dijo.
Entramos en lo que parecía una lechería. 
Me dijo.
- ¿quieres un vaso de leche con canela?
- si claro le dije.
Aquel señor abrió una lechera grande nos sirvió la leche y para acompañar unos "rellenos"  
- Toma Carlos un calcetín como los llamas tú.
- ¿Cuántos para casa? 
Aquel bollito se quedó en mi paladar, en mi memoria, siempre lo  recordaré.

Ese local al cabo del tiempo se cambió al otro lado de la calle y a día de hoy sigue existiendo se llama.
                                                
                                                               EL HORNO



 En la calle Encomienda, 19 en Madrid son famosos los pestiños y en navidad los roscones.
 Parece que el tiempo se ha parado cuando entras allí, el olor a vainilla, canela y bizcocho te embriaga y te hacen sentir que estas en otro Madrid en otro tiempo muy lejano.,.

Desde Madrid el Reportero Histórico