miércoles, 4 de abril de 2018

La calle del Pez de Madrid

Leyendas de Madrid "La calle del Pez"


Madrid febrero de 2018


La muerte en estos días del dueño de un bar mítico de Madrid, "El Palentino", sito en la famosa calle del Pez, me ha hecho recordar una de tantas leyendas de Madrid que mi padre me contaba mientras recorríamos las calles de la capital del reino. Recuerdo al lector que mi era padre invidente y amante de Madrid.

Andando por aquella calle del barrio de Maravillas (sale en el famoso plano de Texéira de 1656) me contaba, que él y mi madre estuvieron viviendo allí "con derecho a cocina" en unos tiempos muy duros,  nada más casarse.




En un momento en una esquina mi padre me dice:

.- ¿Ves el pez?
.- ¿ Dónde papá?
.- ¿ Ahí? ¿no lo ves? ¡si debe estar ahí!
.- Papá, no ves ¿ dime dónde? especifica
.- A ver, que no te enteras...arriba, en ladrillo


"Y allí estaba el Pez que da nombre a la calle, y mientras yo lo veía,  él me contó la leyenda.


En 1556 la calle aparece plasmada en el ya famoso plano de Texeria de Madrid con el nombre de la Fuente del Cura. Así llamada por un cura de Colmenar, que regalo a la villa una fuente con un estanque para que las bestias que llegaban desde Colmenar Viejo pudieran beber agua fresca.

Cuenta la leyenda que un hombre acaudalado compró la finca con la fuente incluida, donde puso, para disfrute de su hija, unos peces de colores.

Al poco tiempo, comenzaron las obras de urbanización de la misma y los obreros empezaron a recoger agua de la fuente. Poco a poco ésta fue disminuyendo; unida esta circunstancia a la sequía el caudal fue bajando. 

"Entre la falta de oxígeno y las impurezas del agua, los peces fueron muriendo. 
Mi padre contaba, que la hija del potentado que se llamaba Blanca, empezó a ponerse muy triste por la muerte de los peces, aquélla niña ayudada por su padre salvó al último pez poniendo al animal en una pecera.





"A pesar de todo, aquél pez murió y la niña cayó en una profunda depresión, de la que no consiguió salir, por mucho que los médicos mas prestigiosos del reino lo intentarán. Preocupados por su futuro, la familia decidió que lo mejor para ella era que profesara de monja en el famoso convento de San Placido.

De él  se cuenta que el demonio poseyó a aquellas religiosas, muriendo sor Blanca de aquel incidente.

Don Juan Coronel,  padre de Sor Blanca, mandó esculpir aquél pez que mi padre me enseñó. El pueblo de Madrid, poco a poco, fue cambiando el nombre de calle de la Fuente del Cura a la calle que tiene un PEZ.

Desde Madrid, el Reportero Histórico